Esta misma noche, en La Rambleta. Porque
como dice Carlos Pérez de Ziriza:
Como una presencia apenas percibida por los
grandes focos mediáticos pero de un peso específico absolutamente determinante:
así es la carrera de fondo que desde hace casi treinta años mantiene Howe Gelb.
(...)
ha estado detrás, como figura en la sombra, de todos
y cada uno de los fregados generacionales que el rock de raíz norteamericana ha
ido deparando en las últimas décadas. Sus ojos han sido testigos (no precisamente
mudos) del auge del Nuevo Rock Americano, del country alternativo, del nuevo
folk o del sonido americana, pero nunca ha gozado del predicamento mediático
del que sí han participado la mayor parte de nombres emblemáticos de aquellos
movimientos, quizá porque resulta harto difícil reducir la relevancia de su
nombre a un estilo determinado, más allá del uso y abuso (inevitable, en su
caso) del calificativo desértico,
recurrente coletilla que siempre ha venido como anillo al dedo para adjetivar
la idiosincrasia de su sonido.
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