08 junio 2011

la jerga de la corrupción

Que la corrupción campa a sus anchas en la Comunitat Valenciana en particular y en España en general es una evidencia. La cosa, es decir, la dignidad y el respeto por lo público y de todos, parece harto complicada para un buen número de políticos y empresarios insaciables y poco o nada escrupulosos. Eso parece no tener cura y la justicia, aunque se pretenda no pensar así, se le antoja a una buena parte de la ciudadanía que mueve las corrientes a favor de tantos desmanes. Vamos, es un suma y sigue.

Pero a parte de todo esto contra a lo que la ciudadanía se moviliza, se indigna o acaba por dejarlo por imposible, la corrupción, presunta siendo periodísticamente correctos, nos deja una curiosa forma de hablar, una jerga propia que podríamos llamar pijo-porno-mafiosa-escatológica-requetempalagosa.

A cualquiera que la escuche o, mejor, lea las transcripciones, porque esa es la forma en la que habitualmente nos llega, le avergüenza sobremanera. El último ejemplo viene en varias entregas del conocido como Caso Brugal y que tiene su epicentro en Alicante.

Vía :: Las Provincias |


Compra de regalos en vísperas de la Navidad de 2008
Mujer de Ortiz: «Escuchame, Enrique, ¿por qué no le compramos un buen regalo a Sonia y pasamos de los concejales, te vas a gastar 3.000 euros en las concejales?»
Enrique Ortiz: «Un detalle, por una tontería, luego los tienes a tu disposición. A los del Ayuntamiento hay que tenerlos contentos porque hay un huevo de intereses, hay que hacerlo. Oye, un bolso de 200 euros, no pasa nada».
Felicitación el día de Navidad
Sonia Castedo: Enrique, soy Sonia.
Enrique Ortiz: Sonia. ¿Cómo estás, cariño?
S. C.: Muy bien, bombón (...) Muchas gracias por el regalo.
Conversación con un empresario el 14-5-2008
Antonio Arias: Hombre. El martes he estado en Valencia y me dijeron «acabo de hablar con éste y en 35 millones de euros». No está mal ¿no?
Enrique Ortiz: No está mal, no, no está mal, está bien.
Antonio Arias: Está bien, para que no te quejes tanto, coño.
Enrique Ortiz: No está mal, pero tengo que llorar más, porque yo soy la polla insaciable.
Antonio Arias: Eso es, lo digo yo siempre, 'Enriquito es la polla insaciable'.


Vía :: El País |

Oye, y tu amigo Mario se porta de puta madre (...). Porque sí, como te lo digo. ¡Joder, qué tío! Es un tío legal, pero que te cagas. Y el tío se está, se lo está currando que te cagas. Lo está haciendo para nosotros, te lo digo de verdad, nos está apoyando a muerte (...). Me ha dado los mantenimientos de las carreteras, que no tenía ninguno, que entrar ahí es supercomplicado. Y me ha dado una zona acojonante. Me ha dado el tramo más grande de tranvía, el túnel. Me ha dado, nada más entrar, la carretera de acceso allí en Valencia, una carretera que te cagas. O sea que, pero vamos, te lo digo, no comentes nada porque encima la gente piensa que... Piensan que conmigo, que no me puede ver. No sé por qué. Pero la gente cree que me llevo mal con él". Este fue monólogo de Enrique Ortiz a un amigo de Mario Flores, grabado por la policía el 25 de julio de 2008.

El promotor todavía añade: "Pero de puta madre, de puta madre, porque en Valencia dicen: 'no, no, es que Mario a Ortiz no lo puede ver', ¿sabes? Y yo digo, 'pues mejor así".

Diez días antes, el mismo consejero llamó a Ortiz mientras cenaba con otro empresario alicantino. Según los investigadores, "Mario le comunica que Enrique ha sido adjudicatario de las concesiones de mantenimiento. Enrique le dice que el lunes está en Alicante y quedan para verse. Mario le pide discreción con la noticia".

Dos minutos después, Ortiz llama a un empleado y le dice: "Me acaba de llamar Mario en este momento, que nos acaban de adjudicar el mantenimiento de carreteras".

1 comentario:

aran dramatica dijo...

Proyecto teatral sobre la corrupción política durante la burbuja inmobiliaria, basado en transcripciones como las que figura en este post.
http://www.arandramatica.com/