La Diputación de Valencia a través de su jurado, bien alimentado, ha hecho públicos los premios a lo mejor de Fallas. Han tenido la desfachatez de hacer triunfador a Enrique Ponce, que, tras estar anunciado en dos tardes, cortó una más una regaladas en su primera comparecencia.
Mi terna sería la siguiente:
Alejandro Talavante
José Calvo
El Califa
La Diputación, su jurado, ha premiado al Núñez del Cuvillo que le cortó Talavante, precisamente, las dos orejas. Por no herir sensibilidades, tal vez, se han dejado fuera a "Eneldo" de El Torero, al que sólo le cortó una oreja Juan Ávila, lo que no quiere decir que estuviese mal: Ávila estuvo bien, sólo que el toro mejor, al que por cierto lidió impecable César Fernández y por eso decir que en su premio sí han acertado; y a "Verderón", de Fuente Ymbro, aquel al que Víctor Puerto lidió al revés.
Dos toreros a los que se les cruzó la suerte en dirección contraria el martes trece fueron Fernando Cruz y Ambel Posada. Cruz marcó el digno y comprometido camino de la enfermería. Posada cogió de rebote un posible sobrero de Martelilla, que le sirvió. Fueron dos torero que no vinieron a echar el rato. Igual que Paul Abadía "Serranito", que se quedó sin toros. O Miguel Ángel Perera, al que sin apretar el acelerador un fuenteymbro le puso en bandeja un generoso triunfo, que obvió reafirmar en su siguiente turno. Algo parecido le ocurrió a El Cid, la tarde en la que a Ponce le regalaron su 33 puerta grande en Valencia.
Novilleros: han declarado triunfador al nuevo Palomo Linares. Y esto no es cierto, porque no hubo en la Feria de Fallas ningún novillero triunfador.
Y entre tanto premio se han olvidado de lo peor. De la mayor vergüenza, la ocurrida el 17 de marzo de 2007. Uno, por todo lo que presenció aquella tarde pensó por unos críticos instantes en aficionarse a la papiroflexia o a cualquier chorrada y dejarse de aquella mierda. Villán lo contó muy bien en El Mundo, por cierto.
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