30 mayo 2008

la verdad de bolívar y la casta de los palha


Foto: Juan Pelegrín

El titular elegido es a conciencia, porque primero la tarde de Luis Bolívar ha sido de torero grande y porque luego la corrida de Palha ha supuesto el reencuentro con la seriedad del toro y con la casta, aunque sólo fuese en los tres primeros y también en el sexto, que ya es bastante.

La imagen de Manon de Rachido en los corrales era la que más cosas me sugería, pero, no es que me las quiera dar de pitoniso, ayer la blogosfera taurina estaba para otras cosas y si apostábamos era con la boca pequeña. Por la tarde, tras su muerte, Rachido fue premiado con la vuelta al ruedo. Apenas diez minutos antes, era Luis Bolívar el primero que apostaba por el toro y se iba a los medios para darle un cambiado. A partir de entonces Bolívar siempre iría por delante del toro, marcando la distancia. Porque si Rachido tuvo ocasión de sacar a relucir su casta y su bravura fue por la relación que le ofreció un generosísimo y torero Luis Bolívar, siempre muy de verdad. Rachido embistió intenso, sin descolgar casi nada y muchas veces sin rematar el muletazo hasta el final, como saliendo distraído. Es cierto que no era fácil con las galopadas que se daba. Pero por comparación, la embestida del primero, hasta que al final acabó buscando las tablas, fue mucho más entregada e igual o más intensa.

Luis Bolívar toreó, mandó y pudo. La última serie con la diestra, la más cuajada, antes de coger la espada es cuando Rachido más humilla. Antes lo había bordado al natural, desplegando el cartucho y cargando la suerte -cargar la suerte, ¡oh!- a un toro, toro: como para que luego nos entretengamos en cantar duendes y chispazos de arte. El sablazo envió al traste un triunfo rotundo.

Rachido, que había empujado sobre todo en la segunda vara y que se dolió en banderillas tras el primer par al menos, fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. Soy de los que cree que Joao Folque le debe una a Luis Bolívar.

En el sexto, el colombiano de Cali se la volvió a jugar ante otro torazo siempre con la verdad por delante. Con más problemas este palha, al menos tuvo intención de ir más por abajo y es por eso que cuando llega la voltereta lo levanta por la corva y no más arriba. La faena, por la emoción y la verdad, volvió a valer para el triunfo, pero, otra vez, el sartenazo que le endiñó lo dejó seco.

La corrida de Palha tuvo casta, poder y pies. El playerote primero fue intenso, planeaba a media altura, hasta que se fue hacia las tablas. Peleó bien en el segundo puyazo sobre todo. El primero de Sánchez Vara fue noble, tanto que el propio Sánchez Vara esperaría otra cosa tras las varias ojeadas que le echó. Con éste estuvo bien con el capote y mal con la muleta.

Con el cuarto, más complicado, también yendo por arriba, Encabo no se dio coba y el quinto se lo quedó todo dentro y decidió pararse. La afición tenía ganas de disfrutar de verdad y como lo hizo, sacó al mayoral de Palha a saludar. Qué pasará, entonces, con los de Adolfo y Victorino.

PD: Y a todo esto Pau Gasol hace historia y se mete en la final de la NBA con Los Ángeles Lakers guiados siempre por un soberbio Kobe Bryant.

2 comentarios:

Admin dijo...

Ya era hora!! gran toro el 3º, pero también el 2º.

A ver si ahora pasan los Celtics, y revivimos los salvajes duelos de los 80...

Unknown dijo...

un gran toro el tercero; un inmenso bolívar. al segundo para mi gusto le faltó un pelín más de chispa o una muleta más templada. estoy seguro que eso a sánchez vara le descolocó... tanta "pastueñidad" no podía ser en un palha.

las finales lakers-pistons de finales de los 80 también tenía su aquel, aunque siempre ganasen los bad boys de Thomas y compañía... pero por equipazo, que pasen los celtics.