Podría mentar tres, cuatro discos de reciente aparición de esos que contienen la belleza de manera forzada, que parece que de repente aquello va a estallar, pero que al final queda ahí como a la otra parte de un grueso cristal, que sólo permite escuchar. Y tú, deleitado, lo único que se te pasa por la cabeza es cruzar a la otra parte y disfrutar de aquello sumergido. Suele ocurrir con los consagrados tras una larga trayectoria o con aquellos recién llegados pero que lo tienen fácil para presentarte trabajos de alta costura. El primer caso ocurre, y es el que ahora nos ocupa, con Rickie Lee Jones, en la brecha desde 1979, con su reciente “The Sermon on Exposition Boulevard”...
Rickie Lee Jones, de su último disco "The Sermon on the exposition boulevard", Falling up. El que toca la guitarra es un pavo de mucho cuidado, descaradísimo de cuerna.
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