golpe de estado en honduras

El golpe de Estado en Honduras ha tenido trato cuanto menos extraño en los medios españoles. Lo digo por el seguimiento que está haciendo Tur en Testigo Accidental con un post que todavía sigue actualizándose.

Una rápida conclusión de todo ello es lo rápido que se puede vapulear la democracia allá en Centroamérica y lo fácil que es pillar en fuera de juego a la comunidad internacional y a toda su corte mediática, que se quedaron en un primer momento sin saber qué hacer, decir o informar.

Luego, el análisis de la situación llega, seguro, a un fondo demasiado trabado. Mucho más que la simpleza de señalar a Hugo Cháves como uno de los detonantes del conflicto, que es lo que viene a decir en su artículo de opinión (interesada) Joaquín Villalobos ayer en El País:

"En Honduras se ha roto la cuerda de un conflicto geopolítico que viene creciendo en toda Latinoamérica, cuando Chávez se mete lo mismo en Colombia, que en Perú, Argentina o Bolivia. Honduras, una sociedad conservadora, de cultura política provinciana y primaria, de larga tradición golpista y con una izquierda también conservadora y pacifista, fue sometida a los debates del modelo bolivariano de reforma constitucional, reelección y socialismo del siglo XXI".

Por mucha influencia chavista y todas las claves que hayan podido chocar, la decisión del pueblo hondureño había quedado expresada en las urnas por vías democráticas. Romper esas reglas por vía de un golpe de Estado con las armas por delante merece y necesita de la condena firme y sin titubeos de todo el mundo. La defensa de la democracia debe ser inmediata, y malo es pararse pensarla dos veces.

La situación en Honduras es la que es cuando se cargan los principios democráticos e impera el poder del ejército. El reportaje colgado en la red sobre la represión que están sufriendo los medios de comunicación hondureños desde el golpe, detención y expulsión del país del presidente elegido democráticamente en las urnas, Manuel Zelaya, es la mejor prueba de hasta qué punto se han cercenado las libertades.

Vía :: Escolar |


Y por ahora la situación sigue igual ante un nuevo paso: Zelaya, que cuenta con el apoyo internacional, está dispuesto a volver a Honduras mañana jueves. Y al mismo tiempo, el presidente del gobierno golpista, Micheletti, ha dicho que será capturado si regresa y la Fiscalía hondureña ha emitido una orden de captura internacional sobre Zelaya.