Se celebró ayer la tercera jornada del 'Segundo Taller de Música. El Nou Model Musical' en el CCC Octubre. El tema del día: 'Redes sociales, canales temáticos de la red e intercambio de Archivos P2P. Influencia e impacto.' En la mesa Borja Prieto, director de contenidos de Myspace; Arturo Castelló, director de Canales Corporativos, Víctor Domingo, presidente de la Asociación de Internautas, e Ignacio Escolar, periodista, bloguero y ex director del diario Público.
El debate --o lo que escuché desde que llegué (tarde) hasta que me fui--, como el cuento de nunca acabar, fue de la revolución que ha sufrido la música con los nuevos medios. Se nombró un buen puñado de veces la palabra "democratización", además de por lo bien que suena, porque la red pone al alcance de cualquiera prácticamente toda la música y la tecnología una importante cantidad de herramientas como para hacer con ella lo que sea. Y las dudas de siempre, que quedan sin respuesta o en el mejor de los casos se solucionan con un 'hay que buscar las otras opciones que deja el negocio', de los artistas, los autores --porque llamarlos creadores suena demasiado bíblico-- que no ven un céntimo de todo ese tráfico con su obra y no les queda otra que tomarse todo esto como una super promoción que acaba en un a ver si suena la flauta.
Pero también, apuntó Escolar, así como la invención del vinilo --la música enlatada-- dejó a muchos músicos en paro, y el mp3, que descubrimos con el Napster, el Kazaa, Soulseek o eMule, mató el soporte, resulta que ahora en Reino Unido hasta las descargadas P2P parece que están llegando a su final porque existen herramientas como Spotify que te permiten tener al alcance una enorme cantidad de música sin que ya no ocupe espacio físico, sino que tampoco espacio en tu disco duro. Y por ahí, llegar al acuerdo entre los grandes protagonistas del negocio podría ser más fácil.Luego, entre el público, un músico profesional se preguntó dónde quedaba la calidad, aquella a la que había llegado tras años de estudio y de la que había participando grabando con orquestas hasta que todo quedase perfecto; esa a la que ahora cualquiera, con ciertos medios y tecnología, puede llegar por esa manida democratización. Y se le apuntaba que para eso, además, hacía falta talento y que de eso --talento para crear-- ahora hay mucho más que en otra épocas. Y se preguntaban después por la calidad del sonido y que la gente se ha acostumbrado a escuchar música de cualquier forma.
Luego, otro quería olvidarse de la prehistoria y que le diesen el truco de cómo enfocar todo lo que la red pone al alcance para pegar el pelotazo y triunfar. Le recomendaron convertirse rápido en un tipo 2.0 y abrirse un Myspace, un blog, un twitter, una cuenta en Facebook, otra en Tuenti, y a echarle horas, porque eso también es trabajo. Y se comentó la estrategia de Zahara desde Myspace y otras redes sociales como Facebook para alcanzar el éxito, ponerle la canción La Vuelta y multiplicar en un plis-plas su caché por 10.
Que tal vez ahora el negocio no es vender discos, pero ahí están los conciertos, el merchandaising y todo eso. Pero que eso a las discográficas les va a costar entender. Y que a los grupos no les queda otra. Evidentemente.
PS: Y a mi --entre otras cosas de este tema-- lo que me preocupa, como consumidor de música por todas las vías que están a mi alcance, es que si ahora nos acostumbramos a consumir canciones por unidades, que es como se están vendiendo, por ejemplo, en iTunes, qué pasará con el concepto de álbum en unos años. Como en los toros, no quiero que me recorten el espectáculo. No quiero sólo un lance, o que me quinten el tercio de varas o la suerte suprema. A mi me gusta el disco, me gusta escucharlo entero porque me permite entender mejor a una banda. Cualquiera es capaz de sacar un temazo, pero no todos son capaces de hacer un buen disco.
PS2: Hoy el debate lleva por título: 'Discográficas. La especialización como vía de futuro'. Participan Íñigo Pastor (director Munster Records); Carlos Galán (fundador y director general de Subterfuge Records); Luis González (director de Hall of Fame); y Gerardo Cartón (director general de PIAS Records Spain SL). Seguro que todo se ve con mayor dramatismo.
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