Después de un giro por Italia de cinco días, o pon seis porque he aprovechado todavía la última mañana para darme un paseo por Pisa, ahora toca dar la brasa por unos días en el blog y entrar en detalles, más allá de lo (poco) que he ido diciendo en Twitter, algo a lo que le voy cogiendo el aire poco a poco.
Del viaje todo fue bueno, excepto los embarques en los aviones. Porque pica que antes de embarcar la compañía aérea de bajo coste Ryanair te sople (a la pareja) por diversos motivos 155 euros a la ida y 30 a la vuelta. Aunque claro, la culpa es de uno por primo, que es como realmente te hace sentir semejante compañía.
Resulta que uno desde que tomó su primer avión había aprendido que con presentarte a la hora de facturar con el D.N.I. había suficiente. Te identificabas, tu nombre aparecía, facturabas las maletas, te sentabas a esperar la hora de partida y santas pascuas. Ahora con Ryanair ya no es así.
Resulta que tienes que imprimirte un hoja, el Check Point le llaman, y eso hace las veces de billete. Si no lo llevas, prepara ni más ni menos que 40 euros. Si lo llevas, ellos se ahorran darte un billete físico porque lo comprobé en la vuelta: me metí en ciber de Bologna regentado por paquistaníes, pagué 70 céntimos por media hora de conexión y dos impresiones y me ahorré tener que desembolsar 80 euros.
Se ve que el negocio le va bien a Ryanair, que son bastantes a los que hacen sentir como auténticos primos e incautos. Hace poco más de una año una pareja de amigos, según me cuetan, pagó sólo 5 euros por cabeza por no llevar el maldito folio impreso llamado Check Point. Hoy, la cosa ya va por los 40 euros. Y no puedo dejar de preguntarme: ¿a esto cómo se le llama?
Luego está la cuestión del peso, un invento ya viejo en las mal llamadas compañías de bajo coste. El peso máximo para no pagar con Ryanair está en los 15 kilos. A partir de ahí, por cada kilo que te pases tendrás que abonar 15 euros para que tus pertenencias puedan viajar. Y lo curioso sería saber hasta qué peso la compañía estaría dispuesta a admitir: ¿Me dejarán subir al avión hasta 50 kilos o más de peso por supuesto que pagando? ¿Lo del peso de los equipajes es una excusa para sacar pasta o se hace por la seguridad del avión? ¿Por qué no ponen un peso máximo del que no podrías pasar en vez de un peso mínimo para hacerte pagar sí o sí? ¿O mejor, por qué no hacen pagar el precio real del billete y así se ahorran dar sorpresas que no tienen ninguna gracia?
La cuestión es que al final te pillan siempre. Cuando compras el billete en Ryanair ya pagas hasta por elegir asiento. Preferencia lo llaman. Si no pagas, te sentarás donde puedas. Si quieres facturar una maleta, dos o las que sean, también tendrás que pagar. Y así todo hasta que te das cuenta de que por mucho que te digan que con Ryanair vuelas barato, al final te acaba saliendo caro, carísimo, y lo peor es que se te queda cara de bobo cuando te la meten doblada.
PS: Lo de "lo barato sale caro" con Ryanair en la red parece ya un tópico.
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