A la inacabable colección se acaba de sumar Francisco Camps, presidente de los valencianos aunque no lo parezca, en su despedida de Les Corts hasta el próximo més de febrero para vergüenza de todos en su ataque/defensa ante Ángel Luna, portavoz del PSPV, en el rifirrafe insultate para quienes votaron una u otra opción.
A usted le gustaría montarse en una camioneta de madrugada, venirse a mi casa y que yo apareciese boca abajo en una cuneta"
Definitivamente, las formas hace tiempo que se desaparecieron. La bajura política valenciana se ha convertido en la infantil disputa del 'y tú más'. Pero de la inocencia del niño poco tienen los políticos valencianos. Ya no basta con dárselas de "honrado" repetidamente, una y mil vez. Hay que serlo realmente, y además de todo parecerlo en cada una de sus acciones, en cada una de sus palabras. Y ahí, hace tiempo que no hay quien se salve. Por lo demás, no se preocupe. Es normal que su grado de indignación vaya en aumento y que no se sienta identificado con está panda de políticos que nos ha tocado sufrir y mantener.
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