a vueltas con la feria de julio

La Feria de Julio va a seguir andando sobre el alambre una edición más y eso no es nuevo. Si en su momento --y ahora también-- dijimos que es digna la edición de 2009, es por la presencia de las dos castigadas ausencias falleras. Sin Perera ni Morante, la de Fallas era una feria de baja intensidad. Y ahora que sí que están en Julio, se prentende también crucificar a ésta. Pues tampoco es eso.

Cuando se presentaron los carteles de marzo diferentes asociaciones no tardaron en manifestar su rechazo por las ausencias y por las presencias. Lo hizo la UTAV y lo hizo ASABAF. Ahora no deberían tardar en llegar sus protestas. Aunque a la Feria de Julio de 2009 lo que le falta es una tarde más, pero no una cualquiera, una tarde rematada, por ejemplo con El Cid, El Fundi, Enrique Ponce o Cayetano, José María Manzanares y Daniel Luque, y toros de Manolo González por citar a la ganadería triunfadora en la edición de 2008.

Un festejo más con fuste y brillo, pero sin desechos y medios-toros, y la Feria de Julio sería otra. Eso lo sabemos todos y la crisis también. Una corrida de toros más, como el año pasado o el anterior cuando la feria si contó con cinco festejos mayores.

Pero es conveniente hacer memoria. La de 2008 fue buena sobre el papel. La mejor en mucho tiempo, pero eso: a priori. Luego, conforme fue pasando la feria acumulé titulares como 'Mucho colorín y para la fiesta, colorado' o 'El gran escándalo'; y claro, el remate tenía que llegar con una merecida queja de la Unión de Abonados, que antes no habían dicho nada porque seguramente aquellos carteles serían de su agrado en un principio.

Y si nos vamos a 2007, veremos que la redondez de la feria se debió a un par de cambios en la primera corrida, entraron Jandilla y César Jiménez que no estaban anunciados, y al triunfo de los modestos Tomás Sánchez y De la Rosa con toros de Los Bayones en el cierre del ciclo. Lo demás, territorio de figuras, fue la reducción del toro y un inaguatable baile de sobreros. Y probablemente entonces el toro mejor presentado fue un manso eral de La Remonta que hirió al becerrista Fernando Beltrán. ¿O no?

Así que, por los precedentes, seguiremos respetando la dignidad de estos carteles de la Feria de Julio, con Morante y Perera, tan llorados por estar ausentes en Fallas; con el cara a cara entre Hermoso y Ventura; y con el atractivo de una de Adolfo, que a ver si resurge de su largo bache, y permite el triunfo de dos toreros como Calvo y Moreno. Y esa de Los Bayones que en Valencia suele dar bueno. Pero claro, la feria es la peor de la historia porque tiene un festejo menos. Pero, un festejo menos de qué, ¿de basura, figurines y medio toro? Si es así, bueno, porque eso es lo que ha venido sobrando en las dos últimas ferias de julio, precisamente. Porque en tiempos de crisis, derrochar en basura bovina y figuritas de porcelana sí que es como para quejarse.